lunes, 28 de julio de 2014

Los domingos a la sombra




Los domingos se pone en marcha una especie de conjura que atenta contra mi persona donde todos los subnormales del planeta y quizás de otros mundos se ponen de acuerdo para reunirse en un punto subnormal para a continuación pasar en tropel uno tras otro por mi puesto de trabajo para tocarme los huevos. Son todos seres absurdos y ridículos que responden a mis "buenos días" con una mirada de odio ya indeleble en sus caretos que se acentúa los domingos, que es el día en que no trabajan y se dan de bruces con la puta vida que llevan que les obliga a hacer algo extraordinario con la familia que han formado y a la que detestan.
Pese a que tengo claro que no es culpa mía el que estos seres tristones preferirían estar haciendo cualquier otra cosa un domingo y que lo que soñaban de criajos no tiene nada que ver con la mierda de presente que soportan día a día y noche a noche y la ansiedad que les produce el hecho muy probable de que su futuro será como su presente o incluso peor si cabe,todo esto me parece muy bien y si lo viera en una peli me daría mucha lástima pero es que a estos avinagraos yo no los conozco de nada y me respetaría yo muy poco a mí mismo si tras recibir sus enfermizas miradas de odio que intento mantener siempre y que proyectan todos sus problemas familiares,conyugales,laborales,vecinales,sexuales y mentales luego les diera yo las gracias por su agradable visita y les mostrara la mejor de mis sonrisas de panoli que reservo para ocasiones tan especiales.Por otra parte juro que me sabe fatal cuando estos papás imbéciles llevan niños pequeños en la parte trasera del coche y éstos tienen que presenciar el desprecio bochornoso y vejatorio que devuelvo con creces y en defensa propia a sus rancios progenitores, pero mejor que sepan cuanto antes que su superpapi es un puto garrulo sin educación que intenta pagar con el primero que pasa sus odios y frustraciones,quizá les doy una lección dura a esos nenes pero si no lo hago yo lo hará otro porque otra cosa que me ha enseñado mi puta vida que es un estuche al que le falta el rotulador rosa es que estos mentecatos son así de escupibles con todo el mundo porque es imposible querer a nadie si no te quieres a ti mismo bla bla bla...Joder,parezco el Colelo ya!!!
Con el tiempo y ya sin cañas he desarrollado una especie de instinto de supervivencia cerebral que repele cosas,situaciones y personas dañinas cual barrera protectora con pinchos afilados y ponzoñosos. A base de ostias y palizas la vida me ha incrustado un chip preventivo que no pita en los aeropuertos pero que sí me ayuda a no ser tan primo y a desconfiar de los desconfiables y a tener muy clarito que no todo el mundo vale la pena y que hay gente y gentuza y la movida esa de que no sé dónde cuecen habas.
De hecho mi instinto antes mencionado que paulatinamente se va afianzando en mis tripas y va adquiriendo confianza y poder progresivos ya lleva un tiempo dándome collejas para que cambie de trabajo y ponga fin a otra etapa en la que en general he disfrutado mucho y he conocido a gente maja. Me estoy apalancando un poco y necesito un cambio de aires o unas vacaciones pero teniendo pasta para poder llamarlas vacaciones. Apenas acostarme mi conciencia se queda sopa porque aunque no soy un cascabel tampoco soy un estúpido o un vaguete de neuronas como mi compi a quien nadie traga porque es indigesto como él solo.
Yo también he estado depre,no siempre he sido tan payaso (término despectivo que para mí es todo lo contrario),no siempre me levantaba de la cama proponiéndome reírme de algo cuanto antes. Igual que intento escribir humor podría escribir drama sin tener que documentarme, pero no me apetece. Era un cabronazo,hice algunas putadas,no quería,básicamente me jodía a mí mismo pero siempre hay daños colaterales,convertí en polvo la puta piedra de las veces que tropecé en ella,épocas en que mañana era peor que hoy y que mi día más tranquilito era una puta locura frenética. Lo que no recuerdo es querer invitar a participar en mi juego cabrón a personas a las que no conocía,y sí tenía claro que el problema lo tenía yo y no los demás. Un día de marzo me creí que la vida te la reparas si le echas huevos y así va siendo hasta hoy. No estoy dando consejos coleleros que desoyen Los Lunnis,sólo estoy hablando de mí y de que es imposible estar todos los días de cachondeo pero así quiero que sea amén.


En fin,Dios dirá...otro que tal.


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